Bruno Sfeir: Paisajes y pinturas que estuvieron escondidos en el alma 
Bruno Sfeir: Paisajes y pinturas que estuvieron escondidos en el alma

Sandra Acosta

El próximo viernes a las 20 horas en el Museo de San José se inaugurará una exposición de trabajos artísticos de Bruno Sfeir, joven artista maragato de indiscutible proyección internacional cuya última exposición se realizó nada menos que en el Salón de los Pasos Perdidos de la sede de UNESCO en París.
Alumno de Oroño, Lara y Fernández, egresado de la Escuela de Bellas Artes, del Instituto Superior de Pintura Van Der Kelen (Bruselas- Bélgica), y del Club de Grabado de Montevideo.
Sólida formación técnica respalda al artista, con un bagaje iconográfico particularmente rico en símbolos y significados, en una delicada danza de luz y color, la obra de Sfeir es de alta precisión técnica y profunda fundamentación filosófica. Sfeir ha ganado una sólida y respetada trayectoria en el campo de las artes plásticas, ha expuesto sus obras en Uruguay, Brasil, Argentina, Estados Unidos y Kuwait, ha obtenido galardones en diversos concursos y sus obras se encuentran en colecciones de varios países latinoamericanos, así como en el Museo de Arte Moderno de Kuwait, en Estados Unidos, Bélgica, España y Francia.

PH: Empezaste a pintar siendo muy joven. ¿Cuándo descubriste que deseabas expresarte y vivir a través del arte?

Expresarme a través del arte fue un proceso natural y espontáneo que comenzó a mis nueve anos y no tuvo interrupciones hasta el día de hoy.

PH: En tu obra se aprecia una influencia constructivista, pero es al mismo tiempo surrealista y siempre cargada de símbolos. ¿Cómo definirías tu estilo (si eso es posible)? ¿Qué vertientes lo han determinado? ¿Maestros, viajes, vivencias, intuición?

Creo que mi trabajo esta determinado por todo lo que mencionas en tu pregunta. La formación que recibí en algunos talleres fue valiosa, y los viajes y experiencias de vida han nutrido la obra. No me cuestiono demasiado cual es mi estilo. Me interesa vivir la experiencia, esto es, el acto de pintar. En cada pintura que comienzo siento que emprendo un viaje. Me mantengo receptivo, expectante, sin ansiedad y el ser va tomando nota de lo que percibe en el recorrido. De este modo, la obra va tomando forma. Es un proceso que aunque lento, lo vivo con gran intensidad. Al final, cuando contemplo el trabajo realizado, tengo la sensación de que las pinturas estaban hechas en mi interior y solo requerían de atención y esfuerzo para salir a la superficie. No encuentro nombre para definir esa experiencia.

PH: Trabajas en distintas técnicas (óleo, grafito, tinta…). ¿Cuál es la que consideras más “propia”?

No tengo predilección por una técnica en particular…

PH: ¿En qué consiste la muestra que inauguras el viernes en el Museo de San José?

La muestra consta de diecinueve obras; diez oleos s/ tela y nueve dibujos (óleo pasteles ). Son trabajos que evocan experiencias y viajes tratados desde mi imaginación. Las medidas van desde 100 X 80 cm hasta 140 X 120 cm.

Los fuegos de artificio en el arte

PH: Muchos consideramos que hay- en general- en el arte nacional actual, poca sustancia y mucho efectismo. ¿Cuál es tu opinión sobre la situación del arte uruguayo?

Aunque debe haber aportes valiosos, en general coincido con tu apreciación. Tal vez este hecho tenga un trasfondo profundo (no solo en el Uruguay) que el arte esta reflejando de muchas maneras. Creo que este vacío de contenidos y efectismos esta vinculado -entre otras razones- a una ansiedad por lo novedoso, y esta ansiedad a su vez esta relacionada a un ritmo de vida que demanda celeridad y ser efectivo. Pero el proceso de crecimiento y desarrollo de una obra consistente tiene su propio ritmo y uno debe decidir si se deja avasallar por el mundo de la prisa o no. También hay que tener en cuenta que hay intereses creados y esto lleva a promover algunas formas de arte y dejar caer otras. Pasado un buen tiempo- como siempre ha sucedido- habrá que discriminar y los trabajos que eran solo efectos, como fuego de artificio desaparecerán.
(Foto: El viernes se habilitó una exposición de Sfeir en el Museo)

 

 

About Bruno Sfeir

Bruno Sfeir estudió en la Escuela Nacional de Bellas Artes de Montevideo – Uruguay, posteriormente se forma con discípulos del maestro Joaquín Torres García y en el Club de grabado de Montevideo. Si bien su pintura toma elementos del constructivismo de Torres García, su proximidad al movimiento surrealista es aún mayor. En su obra, la intuición preside el movimiento revelando a cada paso una iconografía peculiar que elude rápidas conclusiones. Nos encontramos con un trabajo de carácter introspectivo que se manifiesta a través de un viaje interior. Una búsqueda incansable que despierta en el artista un interés por culturas milenarias de enseñanza y espiritualidad. En el año 2000 se traslada al Líbano, (país de origen de su abuelo paterno y gran impulsor de su creatividad) y más tarde al Golfo Pérsico, Egipto y Marruecos. Este es un punto de inflexión en la vida del pintor; pues su obra se impregna de ese perfume oriental, un aroma que perdura hasta en su más reciente producción. Actualmente Sfeir reside en España donde continúa con su prolífica producción. Bruno Sfeir studied at the Escuela Nacional de Bellas Artes in Montevideo - Uruguay, subsequently founded, along with students of the teacher Joaquín Torres García, the Montevideo Engraving Club. Although his painting takes up elements of constructivism from Torres Garcia’s, its proximity to the surrealist movement is even greater. In his work, intuition leads the motion, revealing in every step a peculiar iconography that avoids quick conclusions. It is a job of introspective nature that manifests itself through an inner journey. In 2000, after an untiring search that awakens an interest in ancient cultures of teaching and spirituality in the artist, he decides to move to Lebanon, (country of origin of his paternal grandfather and great promoter of his creativity) and later to the Persian Gulf, Egypt and Morocco. This is a turning point in the life of the painter; because his work is impregnated with that oriental perfume, an aroma that lingers even in his latest production. Sfeir currently lives in Spain where he continues with his prolific production.